Ara profundo y echa basura…
El invierno es idóneo para la labor de mullido del terreno y abonado del jardín, por ello se hace merecida la atención a uno de los mejores aportes que a día de hoy se puede hacer a nuestro terreno: el humus de lombriz.
El humus de lombriz:
Se trata de un abono en forma de substrato totalmente inodoro, obtenido del proceso de alimentación de las lombrices, a base 100% de basuras o estiércoles ganaderos.
El humus de lombriz es natural, no lleva ninguna clase de aditivos. Su aportación se traduce en beneficiosa en cualquier proporción, ya que los excesos de este componente no afectan negativamente a nuestras plantas.
Su PH neutro lo hace apto para cualquier tipo de terreno y especie.
El humus de lombriz puede haber sido elaborado a base de estiércoles de ganados ovinos, vacuno o caballares, normalmente, aunque también existen humus de lombriz de otras basuras o restos vegetales.
Nota: Aunque su procedencia originaria sea los estiércoles ganaderos, sorprende su total limpieza, ya que no huele nada.
El humus de lombriz es a día de hoy la forma mas sana y natural de abonar un jardín.
Lo más habitual es adquirir en tienda el humus de lombriz fabricado, pero si deseas fabricar tu propio humus de lombriz de restos vegetales de tu propio jardín (siegas de cespec, hojas...), hay empresas que venden la lombriz.
La preparación del terreno y el aporte de alimentación en otoño ó inviernos son dos factores muy importantes para mantener un equilibrio apropiado de nutrientes y asimismo encontrar en primavera un jardín precioso
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